Balmiro Ospino Mora falleció en la tarde del sábado en la Clínica La Victoria tras permanecer internado desde el pasado 3 de noviembre, en horas de la noche, luego de haber caído de un bus cuando se dirigía a su casa.

Según contó su hijo, Manuel Enrique Ospino, su papá, de 52 años, se dirigía a su vivienda en el barrio Universal e iba en el bus en la puerta cuando tres delincuentes comenzaron a atracar a los ocupantes del mismo. 

“Había salido del trabajo y se dirigía a su casa. Cuando iba en un medio de transporte por la Circunvalar se montaron tres atracadores. Él iba en la puerta del bus, los atracadores iban dos atrás y uno adelante sentados. En eso se levantaron los atracadores para realizar el acto y el chofer apenas vio eso aceleró y mi papá no se pudo sostener de ningún lado de la puerta. Los atracadores realizaron un disparo posiblemente muy cerca de él y eso fue lo que lo asustó y en eso mi papá no se pudo sostener y se salió del bus por la puerta”, relató.

Según contó el hijo, el chofer del bus se iba a detener para auxiliarlo, pero los atracadores se lo impidieron y le dijeron que acelerara. 

“Una amiga de él iba en otro bus y apenas vio que era mi papá se bajó del bus, la Policía se encontraba allí y la amiga  dijo que lo conocía y los policías se retiraron. Ella llamó a la ambulancia y lo llevaron a la clínica”, contó.

Balmiro murió a raíz de un fuerte golpe que sufrió en la cabeza. 

La víctima dejó tres hijos, era el sexto de ocho hermanos. El hombre laboraba en un puesto callejero vendiendo libros en la calle 93 con carrera 46, en el norte de Barranquilla.

Los familiares piden mayor presencia de la Policía en ese tramo de la Circunvalar, muy predilectos por los delincuentes para atracar buses.